Me acoste a las 3 de la madrugada, otra vez no queria,
pero el silencio del living en la oscuridad con la ùnica
luz de la pantalla de la televisiòn me parece encantandor,
eso, o instalarme en esta silla a plantar la inutilidad por donde
gire el mouse, òptico, ( aquellos, estos otros tiempos modernos).
Me acoste a las tres por que me deje seducir ,otra vez no queria,
por el reality de conejitas de plaiboy, donde todas aparentan ser unas
inutiles, que aman y repiten hasta el joder cansancio que aman a ese viejo de jerf que siempre esta enbata melodeando por las habitaciones
de las conejitas que no hacen màs que comprarse perros y dedicar
su tarde a las màs variadas tareas que relacionan al perro con su amo,
en este caso hablamos de un amo poco convencional, por que tambien
es un animal ( un conejo el amo de un perro ?), Pues si,. Por ese tipo
de banalidades es por que lo sigo, igual todo tiene su comienzo
con Dragon Ball, no puedo despegarme , me encanta. me encanta que peleen, que eleven su ki, que sepan como se hace la triple genki dama,
que un gato sea tan fuerte y que siempre esten tan felices.
No importa, termine a las tres de la madrugada bajo la luz fluorescente casi, de la lampara leyendo Lolyta, que me aburre lo suficiente.
Cerre la luz, tome a mi rana Maria Raquel con la màs tiernas de las caricias y me dedique al sueño. No me podia dormir, claro.
Hoy a las 10 llegamos a una clinica en las afueras de capital federal.
Estaba con èl,. ( no voy a revelar nombres ), mi mamà lo habia convencido de que se operara la nariz. Eso que te liman el hueso, hablamos de operaciones de nariz para alguien que medianamente tiene una inmensa nariz entre sus ojos. èl ,tenia una nariz simpatica.
Antes de ayer ordenando papeles, encontre una foto de cuando era chico, seguro tenia 10 0 12 años y se asomaba lo que hoy iba a ser mutilado, terriblemente mutilado por la mierda que construye mi mamà a espaldas de lo normal, el emporio de la cirujia estetica, el emporio de lo terrible, el emporio de los cuchillos y las tenazas.
Estabamos esperando en las sillas de abajo, entraba y salia gente todo el tiempo, en el colectivo rumbo a la clinica me encargue de decirle todo lo que pensaba sobre su nueva posible nariz, y lo asuste`, por que hablaba rapido, mirando hacia fuera, estaba lloviendo. Y me quedaba en silencio de a ratos largos, eso asusta, las personas tienden a preguntarme que pienso cuando no pienso nada. y bueno.
La cirugia duro una hora, tenia que subir dos pisos por escalera para ir a buscarlo a ver como habia quedado, antes de irse le grite un " suerte " como al pasar, y ahora estaba subiendo muy despacio las escaleras que tenia las barandas pintadas de rojo, una rojo sangre ( muy a lo emporio de los cuchillos) en el primer piso habia una puerta abierta y un señor muy gordo acostado. No se si dije hasta ahora que me aterran los hospitales, clinicas, enfermos, doctores, enfermeras, cuestiones relacionadas a enfermedad, gasas, pelìculas de tiros y agujeros, cirujias esteticas, camillas, vidrios blancos, vidrios polarizados, maquinas de hospitales, vacunas y estetoscopios. Sentia que me bajaba la presiòn, pero no era mi presiòn la que importaba, sino sacarlo a èl de ese horrible lugar y verlo, finalmente verlo, lo que le habian hecho.
Toque el timbre, para que la enfermera abriera la puerta y èl saliera y asi felicidad, en la espera me hice dos trenzas, le cambie el color a su celular,me sone la nariz unas tres veces. La puerta se abrio, se asomo la enfermera vestida a cuadritos , al menos no estaba de celeste toda sangrienta con una lima de carcel en la mano, al menos no tenia un cacho de hueso sangriento colgando del bolsillo, sonriendo, sonriendome.
El aparecio atràs de ella, parecia màs chiquito, los ojos se le habian puesto como dos pasas de uva, tenia las pestañas mojadas, lo peor era lo que tenia màs hacia abajo, una venda cubriendole la parte superior de la nariz, debajo una especie de armazòn como un yeso, y en el extremo superior escapaba la punta de la nariz on sangre, tenia unas vendas màs arriba y abajo. la cara hinchada, los labios hacia abajo, se le caia la baba.
Nunca me prepare para verlo asi, uno mentalmente ante algunas cosas se prepara, no estaba esperando lo peor, lo esperaba con una sonrisa y vamos a casa a descanzar. Estaba mareado, con la cabeza enorme, caminaba despacio, como no sè manejar asensores en estado catatonico, me encontraba en un estado catatonico, ademàs hay deben meter a los muertos y a los que estan bien acuchillados, tuvimos que bajar por las escaleras, los dos pisos, pasamos por la puerta abierta del piso de abajo donde se asomaba ese señor gordo acostado, lo envidie. El estaba sufriendo un montòn, un dolor que no necesitaba. Ya estabamos en la recepciòn, tenia papeles en la mano, yo me imaginaba la època nazi , un taller de experimentos, la gente salia hecha mierda, y no eran judios, pero tambien probaban con ellos, èl estaba peor que la mierda, por que era hermoso, uno de esos papeles era la receta de algo que tenia que tomar, la agarre, lo deje esperando en una de las sillas abajo , y tome la situaciòn por las orejas, tenia que ir a comprar esos medicamentos, llamar un remis y finjir sentirme bien, . a los diez pasos me puse a llorar debajo de la lluvia, iba caminando buscando una farmacia, una remiseria, un kiosco, me limpiaba los ojos, hacia ruido de llorar como un nene chiquito, era una impotencia,.
Rinoplastia le dije a la señora de la farmacia, me dijo algo asi como suerte cuando me fui, se notaba entonces mi cara de muerte ,cuchillos y mareo, parecia como si a mi me hubieran sacado un trozo de nariz , sin anestecia y sin saberlo.
Seguia sentado, con su bolsito entre las piernas, un bolso chiquito de color verde que siempre me dio simpatia, todo lo que hace me da simpatia, hasta cuando me compra helados a la noche y no me gustan, me los como igual. Por la simpatia. Fue inevitable y le pregunte si le habia dolido, me dijo que muchisimo, que le tironeaban de la cabeza, que le limaron el hueso, que lo sintio, que estaba despierto, que le dolia, que le iba a doler, que estaba dolido, estos eran sus 15 dìas de vacaciones, y los va a desperdiciar por un centimetro menos de nariz, mi hermoso èl, mi hermoso comprador de helados mal elegidos, mi hermoso todo desde que tenia casi cinco meses. En el remis, que tambien era rojo, me agarraba de la mano, y le leia en voz alta uno de los tantos papales que le habian dado " dormir a 45 º grados- cambiarse las vendas seguido, y si sangra no se asuste, el post operatorio no duele, pero si le duele conserve la calma ", se le seguia cayendo la baba, tenia la cara màs grande todavia, los ojos màs chico. Que triste todo, que innecesario. Me baje en la plaza flores y me puse otra vez a llorar, y asi fue el dìa.
Cuchillos
Sin palabras.
Hace 11 años
