Primera parte del arte de huir.

Este año en la semana ante terior a que cumpliera Borja yo ya pensaba en que podia regalarle, era nuestro primer cumpleaños juntos y pensè que se merecia toda mi sinceridad. Por lo tanto, una manualidad algo del corazòn.
Se me ocurrio regalarle un "llamador de àngeles" pero con grullas. Para que colgara en su habitaciòn y fuera muy feliz recordando el dìa que habia pasado a los 24 casi un cuarto de siglo, la vejez absoluta.
Me baje un video de internet que explicaba, tan solo con planos de la mano de una china ( juraria por mi madre que era china) como construir una grulla con papel.
Tarde casi 2 horas en entender.
Despues la primer parte estuvo resuelta. Que felicidad, me encantan las manualidades y siempre me salen. Por que tengo alma de ama de casa, como dice mi horoscopo, aunque jamàs piense en vivir con un hombre y esas cosas feministas.
Solo restaba comprar unos papeles duros, y hacer grullas de todos los tamaños. Despues pegarlas a varios hilos, cruzarle una madera y ya està.
Entonces me parecio buena idea que los papeles estuvieran dibujados, en vez de lisos. Se me ocurrio dibujarlos a mano. Jamàs me habia gustado eso del dibujo, jamàs habia dibujado, salvo estampar alguna remera y retocarla con pincel.
Fui a un supermercado y compre temperas y cartulinas negras, marcadores pincel y papel glase.
En casa recore cuadrados, y empece a pensar motivos de dibujos, se me ocurrio un prado verde surrealista ( el que dibuja surrealismo cuando empìeza es por que no sabe, obvio de abstracto, obvio de vacio).
Me gusto tanto ese dibujo, que hice otro. despues otro y otro.
Me fui olvidando de las grullas, y en unas hojas blancas se me ocurrio dibujar caras de revistas. Ahi salieron las primeras " Caricaturas" por asi decirlo.
Las hacia con tempera de forma directa, sin làpiz de por medio. Toda una genialidad para mi, A la tarde siguiente lo mismo. y asi los dìas corrieron y yo pensaba en volverme pintora, frustrada, como siempre.

Un dìa poco antes el cumpleaños de mi querido Borja, le pregunte si le gustaban los "llamadores de angeles" me respondio que no, que las cosas colgantes lo ponian incomodo , que su mamà habia puesto uno hace mucho y el lo habia sacado. Lo decìa sintiendose el rey de la casa y de la milonga.
- A la mierda con tus gustos pense, y màs te vale que me lo agradezcas con una buena sonrisa por que sino. Sino voy a hablar de tu ingratitud por muchos años y te voy a culpar delante de la gente.

En fin, jamàs termnine de pintar los papeles para hacer las grullas, por que estaba ocupada pintando pequeños cuadros en hojas blancas que me habia comprado en el todo por dos pesos. A cambio de eso algunas personas me decian que le gustaba lo mio, que era espontaneo, otras me sonreian, otras nada.
Pinte, dibuje, coloree hasta que un buen dìa pense en tomar clases de dibujo, pero eso viene en el pròximo càpitulo de esta pequeña colecciòn de genialidades de una mente pequeña con muchos recursos para conducirse al fracaso.