El cuadro maldito

Me lo propuse y buscando por el barrio encontre una profesora. Luisa Brasco. Una genialidad de persona.
Resulta que el taller quedaba a 4 cuadras de mi casa, todo derecho por la misma calle. Las clases eran los martes, el dìa explendido de la semana. Duraban dos horas y si querias podias quedarte màs tiempo en lo tuyo hablando con luisa que siempre tenia buen humor.
Borja funcionaba a modo de despertador, a las 8 y 45 hacia sonar el telèfono hasta que a fuerza de no soportar màs el ruido me despertaba y le pedia que volviera a llamar en un rato. Me ponia lo primero que encontraba, una vez fui con el buzo Pijama. Iba aa la cocina me hacia un matecocido en una taza de plàstico. saludaba a mi perra. y caminaba las 4 cuadras restantes totalmente dormida con el matecocido myuy caliente en la mano, llegaba, su novio me abria la puerta, y luisa me sonreia. El taller se dictaba en un atelier en la terraza con las paredes pintadas de naranja. Simpre me imaginaba ese lugar, como seria en primavera. todo rosado por las plantas, los àrboles verdes, seguro saldriamos a pintar al exterior. tomariamos terere.

Se notaba que a Luisa no le gustaba lo mio. Jamàs me lo dijo, pero cuando a alguièn le gusta algo, lo expresa " me gusta , me encanta me exita, viva Peròn" , esas cosas.
Luisa nunca nada, en cambio de eso, retiraba mi trabajo, lo ponia bien lejos y decia " hay que mirar de lejos la pintura, y asi uno la puede ver integra". Y asi cada clase.
Eramos dos y despues se sumo otra señora. Esta ultima habia estudiado bellas artes y la tenia re clara, su marido viajaba por todo el polo norte y no se donde por trabajo, y ella pintaba los paisajes que veia en sus viajes constantes, igual lo suyo era lo abstracto, manejaba el color como ninguna otra mujer de su edad que yo haya antes visto ( no vi màs que a ella sola, en toda mi vida vale decir) . le gustaba el verde el violeta, se notaba en sus dibujos.
A ella tampoco le gustaba lo mio, y a mi no me gustaba lo suyo. y esto se hacia tambien evidente, ella antes de pintar dibujaba todo con l+àpiz y mezclaba los colores cien veces en la paleta, yo en cambio no usaba el làpiz. Por que estaba segura de que lo mio jamàs iba a salir del taller.

Hasta que un dìa Luisa nos invito a pintar en grande. Hojas bien grandes, propuso. La mia la pegue en la pared y dibuje un chico negro y una chica rosada. EWl chico negro estaba furioso y la chica rosada anhelante, la idea habia salido un dìa que me quede a dormir en lo de Borja. Cuando me desperte, el preparo el desayuno y no se que, yo me sente en la cama a dibjar en un block nuevo que tenia, es curioso, pero estaba haciendo la antitesis de lo que resultaba la vida conyugalq ue estaba llevando, jamàs, y toco madera, discuti con borja, como para que èl pusiera cara de tremendo fastidio y yo de profundo miedo ( del abandono, por supuesto. Recuerden soy pintora, pero por eso no abandone el melodrama).
Tarde tres clases en terminar mi primer Gran obra,, Mientras màs cosas trataba de encontrarle Luisa màs se notaba que le parecia horrible aunque me halagaba los colores de la cara del negro, " que buen marròn" alegaba. Yo me sentia profundamente feliz, habia echo algo estupendo.
Me encanta la piel negra. Lo queria para mi. El dìa que lo termine, me quede hasta la una de la tarde, le pregunte si podia llevarlo y me respondio que claro que podia.
Doblo una hoja en la parte donde iba a apoyarse mi mano para no doblar el dibujo. y la puso a modo de manija en el reves superior.
en el trayecto pase por una escuela, un kiosco, una lavanderia, una vereda asfaltandose, una panaderia en la hora pico de los almuerzos, mi vecina la gorda. tenia las manos muy manchadas con pintura, un buzo verde que me habia regalado Borja, muy masculino, unos pantalones joggin negro manchados con lavandina y unas zapatillas con la punta salida.
Iba a principios de Otoño, con el primer trunfo despues de mucho tiempo sobre mi mano.
Una vez cuando era chica, tipo 13 años, mi prima ruty tenia un conejo, ella se fue un findesemana de vacaciones y me pidio que fuera a su casa, que quedaba a 2 cuadras de la mia a alimentar al conejo. me dejo las llaves y dinero. Esa tarde, calculo que era un viernes, fui a ver al conejo, como tenia que ir a comprarle lechuga y zanahorias se me ocurrio salir con el conejo dentro de la jaula a pasear. Como era chico la jaula no pesaba. me acuerdo de pasa por el supermercado chino en el que ahora hay una tintoreria con el conejo, todos me sonreian. Me sentia alguien privilegiada, con algo ùnico en su existencia. un momento perfecto.

Lo mismo con mi preciosa obra. Llegue a casa y la deje en el piso boca arriba al lado de la puerta mientras me lavaba las manos en el baño, justo llego mi mamà y me pregunto que era esa cosa tan horrible que yacia en el suelo. Le dije que nada. y cerre la puerta del baño.
Esa tarde compre un carton. Pegue el dibujo en èl y lo colgue arriba de mi cama.

Borja me dijo que le gustaba pero no le creo. Mi mamà me pregunto por que el negro està tan enojado. Todos tienen algo que objetar como para decir algo, a mi es algo que no me importa.
Supongo que lo màs valioso del arte, es poder llevarlo muy dentro del alma. sin la presiòn del parecer ajeno. Lo hice yo con el sudor de mi intelecto y mis dedos. raye cada centimetro de hoja, lo mire de costado y me desconcerte, despues de sentado y me di cuenta de algo. En ese lugar habia un trozo de mi personalidad. Un azul pasiòn y un marron tierra humeda. Yo era un dibujo patetico y horrible en la pared y me sentia repleta de entusiasmo cada vez que entraba a mi habitaciòn y lo veia ahi colgado, dando catedra de mi vanidad .

Mi profesora de dibujo desaparecio. Un dìa me llamo desde Santa fè, me dijo que se habia ido unos dias por que estaba separada de su novio, con quien vivia en la casa del taller. y que a su vuelta me iba a lllamar. Jamàs lo hiso,. y no tengo su telèfono, bastaria con ir y tocar el timbre, preguntar por luisa. y pedirle que me devuelva la otra gran obra que estaba creando.
Pero y si Luisa no està màs alli?
sì le paso algo malo?
si su novio me dice que mis cosas eran horribles y que las tiro una noche de tormenta y desde la ventana veia como la lluvia rompia el lienzo?
Debo buscarme otra profesora. Por el momento, los dejo con el cuadro maldito. desde que Os difruteis.

Aclaraciòn: las fotos quedaron arriba y ni ganas de ponerlas abajo.